Serie: Las Características y Normas de Nuestra Iglesia Local
2 Pedro 1:19 – Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones;
Nehemías 8:1 – y se juntó todo el pueblo como un solo hombre en la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, y dijeron a Esdras el escriba que trajese el libro de la ley de Moisés, la cual Jehová había dado a Israel.
Nehemías 8:2 -Y el sacerdote Esdras trajo la ley delante de la congregación, así de hombres como de mujeres y de todos los que podían entender, el primer día del mes séptimo.
Nehemías 8:3 – Y leyó en el libro delante de la plaza que está delante de la puerta de las Aguas, desde el alba hasta el mediodía, en presencia de hombres y mujeres y de todos los que podían entender; y los oídos de todo el pueblo estaban atentos al libro de la ley.
Los Dos Cimientos
Mateo 7:24-25 Reina-Valera 1960 (m-7:14)
24 Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca.
25 Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca.
1 Timoteo 4:13 – Entre tanto que voy, ocúpate en la lectura, la exhortación y la enseñanza. (m-7:55)
Hechos 20:26 – Por tanto, yo os protesto en el día de hoy, que estoy limpio de la sangre de todos;
Hechos 20:27 – porque no he rehuido anunciaros todo el consejo de Dios.
Gálatas 1:9 – Como antes hemos dicho, también ahora lo repito: Si alguno os predica diferente evangelio del que habéis recibido, sea anatema. (m-21:15)
Gálatas 1:10 – Pues, ¿busco ahora el favor de los hombres, o el de Dios? ¿O trato de agradar a los hombres? Pues si todavía agradara a los hombres, no sería siervo de Cristo.
Isaías 28:13 – La palabra, pues, de Jehová les será mandamiento tras mandamiento, mandato sobre mandato, renglón tras renglón, línea sobre línea, un poquito allí, otro poquito allá; hasta que vayan y caigan de espaldas, y sean quebrantados, enlazados y presos. (m-28:55)
Nehemías 8:8 – Y leían en el libro de la ley de Dios claramente, y ponían el sentido, de modo que entendiesen la lectura. (m-33:55)
Reinado de Josafat
2 Crónicas 17:7 – Al tercer año de su reinado envió sus príncipes Ben-hail, Abdías, Zacarías, Natanael y Micaías, para que enseñasen en las ciudades de Judá; (m-34:50)
2 Crónicas 17:8 – y con ellos a los levitas Semaías, Netanías, Zebadías, Asael, Semiramot, Jonatán, Adonías, Tobías y Tobadonías; y con ellos a los sacerdotes Elisama y Joram.
2 Crónicas 17:9 – Y enseñaron en Judá, teniendo consigo el libro de la ley de Jehová, y recorrieron todas las ciudades de Judá enseñando al pueblo.
2 Crónicas 17:10 – Y cayó el pavor de Jehová sobre todos los reinos de las tierras que estaban alrededor de Judá, y no osaron hacer guerra contra Josafat. (m-38:00)
2 Crónicas 17:11 – Y traían de los filisteos presentes a Josafat, y tributos de plata. Los árabes también le trajeron ganados, siete mil setecientos carneros y siete mil setecientos machos cabríos.
2 Crónicas 17:12 – Iba, pues, Josafat engrandeciéndose mucho; y edificó en Judá fortalezas y ciudades de aprovisionamiento.
2 Crónicas 17:13 – Tuvo muchas provisiones en las ciudades de Judá, y hombres de guerra muy valientes en Jerusalén.
2 Crónicas 17:14 – Y este es el número de ellos según sus casas paternas: de los jefes de los millares de Judá, el general Adnas, y con él trescientos mil hombres muy esforzados.
2 Crónicas 17:15 – Después de él, el jefe Johanán, y con él doscientos ochenta mil.
2 Crónicas 17:16 – Tras éste, Amasías hijo de Zicri, el cual se había ofrecido voluntariamente a Jehová, y con él doscientos mil hombres valientes.
2 Crónicas 17:17 – De Benjamín, Eliada, hombre muy valeroso, y con él doscientos mil armados de arco y escudo.
2 Crónicas 17:18 – Tras éste, Jozabad, y con él ciento ochenta mil dispuestos para la guerra.
Colosenses 3:1616 La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros, enseñándoos y exhortándoos unos a otros en toda sabiduría, cantando con gracia en vuestros corazones al Señor con salmos e himnos y cánticos espirituales.
(m-52:05.)
Salmos 138:22 Me postraré hacia tu santo templo, Y alabaré tu nombre por tu misericordia y tu fidelidad; Porque has engrandecido tu nombre, y tu palabra sobre todas las cosas. (m-53:40)
Apocalipsis 3:8 – Yo conozco tus obras; he aquí, he puesto delante de ti una puerta abierta, la cual nadie puede cerrar; porque aunque tienes poca fuerza, has guardado mi palabra, y no has negado mi nombre. (m-55:04)
Apocalipsis 3:1010 Por cuanto has guardado la palabra de mi paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que moran sobre la tierra.
Apocalipsis 3:11 – He aquí, yo vengo pronto; retén lo que tienes, para que ninguno tome tu corona.
Daniel 12:3 – Los entendidos resplandecerán como el resplandor del firmamento; y los que enseñan la justicia a la multitud, como las estrellas a perpetua eternidad. (m-56:42))